La Guardia Civil sorprende en Alobras
(Teruel) a tres cazadores furtivos en el transcurso de los dispositivos de
vigilancia y control de actividades cinegéticas y en prevención de la caza
furtiva que realizan la Guardia Civil en la provincia de Teruel.
Los furtivos fueron
detectados a las 2 de la madrugada del pasado 1 de abril cuando circulaban de
forma sospechosa por caminos de la zona conocida como Rambla de Veguillas en
Alobras (Teruel), según informa el Instituto armado en una nota de prensa.
A los cazadores se les
intervino un rifle marca Browning del calibre 300 W.M., una mira telescópica
con visor láser, una linterna-foco de gran alcance y un cuchillo de monte,
material utilizado en la caza ilegal.
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| Material intervenido |
Los agentes detectaron
infracciones por cazar en época de veda, de noche, auxiliados de vehículo a
motor y con luz artificial, así como a la normativa que regula el uso y la
tenencia de armas, al portar un arma dispuesta para su uso y con bala en
recámara.
De hecho se interceptó
a los cazadores antes de que lograran abatir ninguna pieza de animales
protegidos, ni que llegaran a cometer ningún otro delito contra el medio
ambiente.
Por estos hechos se han
tramitado denuncias por la comisión de varias infracciones a la Ley 1/2015 de
Caza de Aragón y a la normativa que regula el uso y la tenencia de armas.
La Guardia Civil en su
función de protección a la Naturaleza, vela por la conservación del medio
ambiente fomentando las conductas de respeto a la naturaleza, vigila y previene
las infracciones contra la Flora y la Fauna, realiza acciones para favorecer su
normal desarrollo y contribuye al correcto aprovechamiento de los recursos
forestales y cinegéticos impidiendo las prácticas ilegales y el consiguiente
perjuicio económico y ambiental que el furtivismo ocasiona a las zonas rurales
y a sus habitantes.
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