miércoles, 21 de agosto de 2013

Cuidados básicos en los perros

      Los perros de caza aunque parezcan más duros necesitan sus cuidados como cualquier perro de compañía y los debemos cuidar bien para que luego en el campo den todo de sí, para darnos un día agradable de caza.
     Lo principal es que el dueño establezca una norma general con respecto a las costumbres diarias, como las comidas, ejercicio, limpieza de la perrera, etc. porque aunque toleran muy bien las alteraciones de la rutina, si éstas son excesivas, vivirá en un estado de tensión permanente.

      Hay que establecer un calendario de desparasitaciones y vacunas en  cuanto a los parásitos, tanto internos ( tenias) como externos (pulgas, garrapatas, insectos y ácaros), éstos deben ser controlados. Para eso tenemos en el mercado collares ,pipetas o lociones etc.

       
        La desparasitación, al igual que sucede con las vacunas, dependiendo de los antiparasitarios que se usen y las circunstancias del cachorro, se deberá iniciar entre los 15 días y los 3 meses. De igual forma, en cualquier caso en que el dueño vea señales de lombrices (sobre todo en las heces), éste deberá llevar a cabo extremas medidas de higiene, como: recoger siempre las deposiciones del perro para evitar contagios a otros animales, lavarse las manos después de un contacto prolongado con el animal, y evitar su saliva.

       Para el caso de los parásitos externos, hay que usar collares antiparásitos, y usar después algún spray insecticida; siendo los parásitos más habituales las pulgas y garrapatas. En la actualidad, las enfermedades que se previenen al vacunarlo de manera rutinaria son: Moquillo, Hepatitis infecciosa, Parvovirosis, Tos de las perreras y Rabia.
    Importante: debe comer siempre a la misma hora y en el mismo lugar todos los días, y siempre deberá tener agua fresca para beber, evitar que se acumule algas o suciedad. El alimento dado al animal debe permanecer en el comedero, si no es pienso, como mucho, un día para que sea fresco y esté en buenas condiciones.
       Todos sabemos que a los perros les encantan los huesos, y es que éstos son buenos para sus dientes y encías. Vale aclarar que sólo hay que darles huesos grandes con tuétano, los de pollo u otros pequeños y afilados son peligrosos.
     A tener en cuenta además que los dulces son malos para él, por lo tanto evitar darle golosinas. Hay alimentos que están prohibidos: vísceras y pescado crudo, siempre debe estar cocidos.