Los agricultores denuncian un aumento de ciervos en
la reserva y rechazan por escasas las indemnizaciones. Si hay suficiente
presupuesto, el cercado se extenderá a otros municipios.
El
Gobierno aragonés, que gestiona la
Reserva de Caza Montes Universales, en la Sierra de Albarracín, ha
indicado el vallado de 300 hectáreas agrícolas de la localidad de Griegos con
el fin de que los ciervos dejen de entran en los campos labrados causando
graves pérdidas en la agricultura. La medida se extenderá a parcelas de los
otros 10 municipios que integran este coto si los resultados son buenos y la
DGA dispone del presupuesto necesario.
La
actuación ha sido muy bien recibida por
los agricultores de Griegos, que al igual que los del resto de los municipios
cuyo monte está ocupado por la Reserva, llevan años protestando por
los daños que los ciervos provocan en las cosechas. Hay parcelas que año tras
año son calificadas por los técnicos de la DGA
como” siniestro total” al no haber quedado en ellas ni una espiga de
cereal con grano.
En estos
últimos días, coincidiendo en la época de siega, las quejas de los agricultores
han arreciado. Si bien el Gobierno de Aragonés indemnizara cada año a los
propietarios de las parcelas dañadas por la pérdida de sus cosechas, son
insuficientes para compensar no solo la cantidad de grano que recogerían en
condiciones normales sino también para reparar el daño psicológico que procede
trabajar todo el invierno para que el verano el sembrado sirva solo el pasto de los ciervos.
Griegos |
Los agricultores advierten de que según su
apreciación el número de ciervos se ha incrementado en los últimos años lo que
explicaría la mayor gravedad de los daños. Frente a los 2.300 ejemplares censados por los
técnicos del Gobierno Aragonés del 2013, los propietarios de campo agrícolas
hablan de al menos 4.000.
Se ha llegado a una situación en la que solo cogen
cosecha aquellos agricultores que por iniciativa propia decidieron vallar sus
parcelas hace ya algún tiempo.